Estábamos sentados con unos amigos en la esquina del barrio donde vivo, estaba medio nublado pero el clima estaba rico, no había humedad (que en esta época del año es bastante alta), y una pequeña corriente de frió recorría el ambiente, era un buen clima para esta verano.

Mientras charlábamos sobre lo que había pasado el domingo pasado en el partido de fútbol en el que el nacional perdió la estrella por que votaron los penaltis, “muchas guevas” dije yo, aunque no es que yo sea una eminencia en el tema del fútbol, la verdad no es que conozca mucho, solo se quienes son lo equipos que ganan y los que pierden, se también que a millonarios lo llaman San Victorino, por que de la octava a la trece solo robos, y que a mi adorado santafecino del alma, como mi tía me enseño a llamarlo lo dicen Montecristo, por que lleva mas de 50 años haciendo reír a los hogares colombianos.

Que ojala mi tía no me escuche decir eso, por que se emberraca, ella desde que tengo uso de razón le gusta el fútbol, pero no digamos que solo le gusta, “le encanta” , como le encanta Roberto Carlos, (el que yo pensaba que era mi tío, por que veía fotos de el en todos lados), desde que la conocí ella me contaba sobre como el santafecino lindo era el mejor equipo del mundo, al cual yo con mi poco conocimiento y mi poco saber sobre el fútbol me convertí en hincha, pero no en esos hinchas acérrimos que se rompen hasta la madre por su equipo, era mas una hincha de los noticieros, eso fútbol que muestran en los noticieros, ese si es una chimba solo muestran los goles y no dura mas de 15 min. Eso era yo un hincha de las perdidas y de las ganadas del santa fe.

Aunque lo mas malo que le pudo pasar a mi tía fue que uno de sus hijos le saliera hincha del Millonarios, imagínese que usted cohercionar a casi diez personas que viven en su casa para que todos seamos hinchas de un mismo equipo y preciso, el chino salio hincha de las chuchas del Millonarios, Como se les suele llamar al equipo albiazul de la capital colombiana, esa historia es muy vacana, un día un tío mió que vivía en un pueblito de cundinamarca llego a estudiar a la universidad, iba a ser el zootecnologo de la familia y pues era bueno para la finca de mis abuelos, pero bueno el llego a mi casa y como buen hincha de millonarios que se respete empezó la pelea con mi tía que millonarios que santa fe, que muchas chuchas, que no se que; y nació mi primo, y cada uno se encargo de lavarle el cerebro, mi tía le decía que santa fe era el mejor equipo del mundo, que, que real Madrid o Inter de Millán que el santa fe era el mejor equipo del mundo, y por el otro lado mi tío lo tenia clavado con millonarios, que esas chuchas del santa fe que “no mijo es que millonarios lo mejor”, y cuando nos sentábamos a comer , mi tío le decía a mi primo que quien era el mejor equipo del mundo y el decía millonarios, y empezaba la pelea. Y no se pudo hacer mucho por el, lo perdimos, el chino se volvió hincha del azul, azul como su sangre aun suele decir.

Yo me he dado cuenta que en mi casa el tema del fútbol es un tema obligado, me imagino que como típica familia colombiana que se respete, pero es que muchas veces se daban garra hasta para jugar parques tenían que meter el tema del fútbol, algunos fines de semana en mi casa jugábamos parques, nos reuníamos con mi mama, mi tía, mis primos y el nuero de mi tía, es decir el esposo de mi prima, que por cierto también es primo mió por parte de mama, resulto ser hincha de…..Millonarios, y pues se podrán imaginar el

mierdero jugando parques, mi tía cogia la fichas rojas, dejando el precedente, que los colores del equipo se llevan a toda parte, y por ende, el esposo de mi prima cogia las azules y empezaban las trampas y ; las peleas que corrió mas de la cuenta “ claro como todos lo hinchas de millonarios ladrones”, y mi mama cogia las fichas verdes y era la casería contra las pobres azules, no se pueden imaginar lo vacano que era verlos jugar, gracias a dios nunca hubo peleas pero casi siempre ganaba mi primo, lo cual no quiere decir nada.

Pero bueno, entre las peleas de mi familia y los partidos de fútbol del torneo nacional, llegaba la época de la eliminatorias de los mundiales en la que todos los colores de los diferentes equipos formaban un tricolor, el de la bandera de Colombia, y empezaban los partidos y la selección Colombia como siempre jugaba como nunca y perdía como siempre, y salían a relucir en todos lo colombianos ese técnico que tenemos adentro, “ que si hubiese cambiado al tino que estaba mamado por que se fue de rumba a voliar bala a Tulúa”, “Ese maturana si es mucha gueva, envés de haber convocado al gordo de valenciano, hay si hubiésemos ganado”, y empezaban con la terminología que solo entendía el profe Carlos Antonio Vélez, “es que si el jugador hubiese golpeado la esférica, con la punta del motoplo del cachibore hubiese sido mas fácil de que la fuerza centrífuga de aire y la atmósfera del ambiente, hubiese metido el gol y hubiésemos ganado”, en ves de hablar el lenguaje del pueblo decir que el negro ese la patio con la mocha y por eso perdimos.